El mal de montano (2002) de Enrique Vila-Matas

Mayo 2020

Nunca me hubiese imaginado leer a Enrique Vila-Matas si no fuese por la recomendación del rapero Tote King, al que sigo desde los trece años. Pues bien; lo he hecho, ya que encontré “El mal de montano” en la biblioteca de mis padres, que bien me advirtieron de la peculiaridad y el esnobismo de este reputado escritor. Y, en cierta manera, me ha fascinado. Ha sido un pequeño gran descubrimiento, perfecto para seguir iniciándome en la gran literatura.

“El mal de montano” (2002) es realmente imposible de definir, pero va de un escritor obsesionado con la literatura y por su incipiente desaparición. El narrador está enfermo de literatura y libros, es un “diccionario deambulante de citas”, y está muy preocupado tanto por su enfermedad como por el devenir de la literatura. Y por ello decide transformarse en literatura.

Es un diario muy personal de un hombre mayor, preocupado por la modernidad, nostálgico e irónico, que no sé hasta qué punto se parece a la vida del autor. Aunque en realidad, es novela, es ficción, una “profesión de embaucadores”. Lectura complicada y densa, para estar concentrado y abstraído en el mal de montano. Hay enfermedades y obsesiones que nos hacen daño, pero que nos ayudan a entender el mundo.