Praga es especial

Agosto 2015

Praga es una de las mayores atracciones turísticas del mundo. Se trata de una ciudad preciosa de 1.3 millones de habitantes, muy iluminada y con un estilo medieval único. Pasear por la ciudad y maravillarse con la arquitectura de los barrios es realmente fácil. Sus poderosos monumentos con el río Moldava observándote, me recordaba al Sena parisino por sus puentes, su vida social y sus paisajes.  La ciudad tenía una gran cantidad de vistas panorámicas que ofrecían los miradores. Un ambiente agradable, cada vez más masificado, y más multicultural y cosmopolita que Cracovia y Varsovia. 

Los checos son conocidos por su carácter serio e irónico. También son aficionados al fútbol y al hockey sobre hielo. Una vez, caminando por un parque en las afueras, nos acercamos a la puerta de un estadio de fútbol, en el que bebían cerveza a una velocidad increíble. Sí, la cerveza es una parte especial del país, en el que sale más barata que la propia agua. 

Los bebés gigantes de Praga. Escalan la torre de telecomunicaciones de la ciudad.

El país es el mayor consumidor de cerveza del mundo. Los checos beben de media 1.5 litros diarios, lo que equivale a unos 550 litros anuales. Además, el precio de la birra oscila entre las 30-40 coronas checas (1 euro = 25 czk), por lo que tomar una cerveza, siempre de 0,5 L y a 11 grados de temperatur, te cuesta alrededor de 1.5 euros. La comida también resultaba económica, se podía comer y beber por unos 5 euros.

Otras curiosidades de la República Checa es la tendencia a las defenestraciones, el acto de arrojar a alguien por la ventana, práctica común en las altas esferas de la política.

En contraposición al anterior hostal, éste ha sido más tranquilo, espacioso y más higiénico. El único inconveniente ha sido la lejanía respecto al centro, que se encontraba a una media hora caminando. A lo largo de mi estancia en Praga me confundieron con italiano tres veces y me ofrecieron droga otras tres.

También pasamos un calor extremo en la ciudad y visité cosas como el espectacular castillo de Praga (uno de los más grandes de Europa), el puente Charles Bridge y el museo del filósofo y ensayista Franz Kafka.

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